Con la vida de niños enfermos de cáncer no se juega, presidente López Obrador

Cuando el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se ve acorralado en situaciones reales que muestran algún fracaso o ralentización en las soluciones de asuntos apremiantes, acude de inmediato a términos como “conservadores”, “fifís”, “golpistas” y otros para descalificar a los inconformes por malas políticas públicas. Sin embargo, en el caso de medicamentos para niños con cáncer no se vale que la ineficiencia se escude tras sandeces.

Entrevistado ayer en un programa de televisión con línea editorial afín a la llamada Cuarta Transformación, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, no sólo negó la escasez de fármacos para este tipo de pacientes infantiles, sino que ligó las quejas de los padres de éstos con la narrativa presidencial que en vez de reconocer y resolver los problemas los minimiza y descalifica a quienes sufren las consecuencias.

“Este tipo de generación de narrativas de golpe, a veces se ha conectado en Latinoamérica, en la historia de Latinoamérica, con golpe de Estado y esta idea de los niños con cáncer que no tienen medicamentos, cada vez lo vemos más posicionados como parte de una campaña, más allá del país, de los grupos de derecha internacionales, que están buscando crear esta bola de simpatía en la ciudadanía mexicana, ya con una visión casi golpista”, expresó López Gatell en el programa Chamuco tv que es transmitido por Canal 22.

Un tema tan sensible que sí existe en todo el país, y que es corroborable en el sistema de salud pública incapaz de abastecer de medicinas a los que padecen enfermedades crónico-degenerativas, debe sacarse de la agenda política y tratarse con enorme sentido social conciliando las capacidades que el Estado por ley debe tener para hacerle frente a cuestiones de este tipo y la desesperación de las familias que viven en carne propia el drama del déficit de medicinas.

López-Gatell ha transitado por la actual pandemia de coronavirus con el discurso que lo encuentra todo bien pero desmentido por hechos que muestran al Gobierno Federal rebasado por los repuntes o nuevas olas de contagios por cierto sin los medicamentos que necesitan los enfermos para salvar sus vidas. No obstante la realidad, la oratoria oficial que desinforma, confronta, miente y no cede, así se trate del sector de la población cuyo cuidado de la salud es de muy alta prioridad para cualquier gobierno. Con la vida de los niños enfermos de cáncer no juegue, señor presidente López Obrador.

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